GR 262 El Chorredero – Las Parras de Martín – Martín del Río es una de las 10 etapas (+ 1 variante) que integran el GR-262, que tiene una longitud de casi 100 km.
Concretamente, este sendero de Gran Recorrido nos llevará a descubrir los encantos del Parque Cultural del Río Martín, en la provincia de Teruel.
Para comenzar esta ruta, debemos desplazarnos hasta las afueras de Las Parras de Martín (localidad perteneciente al pueblo de Utrillas).
Si pones en Google Maps «El Chorredero» de Las Parras de Martín, te marcará la propia cascada, por lo que debes dejar el coche aparcado en un lateral de la carretera a la altura donde veas los carteles informativos.
Como vas a poder ver a continuación, he dividido está primera etapa del GR 262 en varios tramos, para poder explicarlo todo al detalle, no dejarme nada y no hacerlo demasiado pesado a la vista.
Se puede dejar aparcado el coche en un saliente de la carretera y comenzar la ruta donde están los postes informativos (a la salida de Las Parras de Martín). No hay sitio para demasiados vehículos, pero cuando yo fui no había nadie más.
Desde este punto, nos internaremos en un sendero que se vuelve cada vez más frondoso, dejando el río Torrijo a nuestra derecha.
Al final de esta senda, nos encontraremos de frente con El Chorredero, un paraje exuberante donde afloran los manantiales procedentes de Cervera del Rincón y del molino Bajo de Son del Puerto, formando una preciosa cascada.
Como la senda termina aquí, deberemos de volver sobre nuestros pasos hacia la carretera, no sin antes tomar un desvío señalizado a nuestra derecha.
Comenzaremos un ascenso abrupto por la resbaladiza roca (cuidado si ésta mojada porque resbala mucho), pasando por varias cuevas naturales: Cueva Corral, Cueva de Las Brujas y Cueva del Chorredero.
Utilizadas antiguamente como refugio tanto para personas como para el ganado.
Una vez hayamos alcanzado la «Era de las brujas» podremos ver el cartel que indica «KM 0 GR 262» y también las bonitas vistas que se tienen desde este lugar. Volveremos a descender hacia la carretera.
Una vez hayamos vuelto a la carretera, deberemos dirigirnos hacia el pueblo de Las Parras de Martín y llegar a la calle baja, desde donde abandonaremos el pueblo por un camino de tierra.
No os preocupéis porque está todo bien señalizado con postes y con pintura roja y blanca, no tiene pérdida.
Tomaremos el camino de tierra que os he comentado antes, y nos iremos alejando de Parras de Martín, en suave descenso.
Volveremos a encontrarnos con el río y podemos, o bien cruzarlo (por un puente improvisado con postes de madera) y quedar a su izquierda o bien continuar por el lado derecho del río.
En mi caso, la ida la hice por el lado izquierdo, visitando de paso la Fuente del Batán y la vuelta la hice por el lado derecho. La Fuente del Batán cuando yo la visité era un débil chorro de agua que sale de una tubería en la pared.
Muy cerquita de la Fuente del Batán hay una antigua necrópolis llamada Las Artizuelas, me quedé con ganas de visitarla pero lo dejé para otra ocasión porque ya eran demasiados kilómetros.
Nos iremos alejando del río poco a poco, volviendo a caminar por un camino de tierra, y por momentos el paisaje se vuelve salvaje y montañoso.
Y de esta manera, tras una empinada bajada, cruzando un puente metálico y desviándonos a la izquierda, llegaremos al impresionante Paraje de los Hocinos.
El río Las Parras atraviesa de una forma abrupta los plegamientos más occidentales de Sant Just, abriéndose paso entre escarpadas hoces y hocinos en busca del valle del Martín, donde desemboca.
Ejemplo de esto son el Hocino de Las Palomas y el Hocino del Pajazo donde se fusiona el agua, la roca y la vegetación, creando paisajes de una belleza asombrosa.
En estos lugares, se encuentran estratos que son prácticamente verticales, entre los que el río fluye con dificultad y desde donde se precipita con pintorescos saltos y cascadas.
Si queremos llegar al Pozo de Las Palomas, deberemos hacerlo sobre una pasarela de madera de varios metros de longitud anclada en la roca que se interna a través del hocino del mismo nombre.
Para continuar la ruta deberemos de volver sobre nuestros pasos hasta el puente metálico y continuar por el sendero.
Continuaremos por el sendero que en ocasiones nos obligará a cruzar el río a través de puentes o bien sorteará las aguas haciéndonos andar por grapas metálicas en la pared (sin dificultad).
Nos internaremos en la más absoluta estrechez de este hocino del pajazo, hasta que se abra delante de nuestros ojos la espectacular caída de agua del Pajazo. Esta cascada tiene 14 metros de altura y es donde el río Las Parras pasa a llamarse río Martín.
Dejando atrás el Paraje de los Hocinos, veremos ante nosotros el gran Embalse de Las Parras. Aquí, se encontraba la aldea del Pajazo, actualmente sumergida bajo las aguas.
Este embalse, fue inaugurado en el año 2014 y suministra agua a los municipios de la comarca de las Cuencas Mineras, así como a los regadíos y explotaciones ganaderas de la zona.
También vamos a poder observar, la necrópolis de El Pajazo, situada excavada en la roca junto al camino que seguiremos hacia el pueblo de Martín del Río.
Pasando el embalse, comenzaremos a descender y a través de un paisaje salpicado de impresionantes y gigantes chopos, llegaremos a Martín del Río.
Una vez llegados a este punto, solo queda desandar lo andado hasta volver a la zona donde habíamos aparcado el coche en Las Parras de Martín.
A continuación os dejo el track a mi cuenta de Wikiloc, para consultar y descargar esta ruta.