La Murta y la Casella es un espacio natural declarado Paraje Natural Municipal en el año 2004, enclavado en el municipio valenciano de Alzira.
Con sus casi 766 Ha se encuentra dentro del LIC de la Sierra de Corbera, entre las Sierras del Cavall Bernat i de Les Agulles.
Es ideal tanto para ir a pasear en familia, como para hacer alguna de las rutas de senderismo que ofrece este mágico lugar.
Os recordamos que para poder acceder a La Murta es necesario pedir cita previa (tenéis toda la información disponible en la página web del Ayuntamiento de Alzira).
Si venís desde Valencia: la distancia es de unos 48 kilómetros y tardareis aproximadamente una hora en llegar.
Justo en la entrada, hay disponible una amplia zona de aparcamiento asfaltado con zonas habilitadas con bancos y mesas.
El horario de acceso es:
Fuera de este horario el entorno estará cerrado con una valla que hay junto a la caseta que hace de punto de información.
También estará cerrado los días de fuerte viento o cuando haya nivel 3 de riesgo de incendios forestales.
Este paraje ofrece al visitante un interesante patrimonio histórico-cultural, donde podemos destacar el Convento de los Jerónimos (también conocido como el Monasterio de la Murta).
Esta edificación está declarada Bien de Interés Cultural (BIC) y engloba las ruinas en restauración del propio monasterio, la Casa Señorial, acueducto, balsas y hasta una nevera.
La Casa Señorial, el Jardín Romántico y la Capilla de la Mare de Déu de la Murta están dentro de un recinto amurallado y cerrado a los visitantes. Únicamente puede visitarse en fin de semana (yo no pude verlo al ir entre semana).
El magnífico desarrollo arquitectónico del monasterio se debió a las importantes donaciones procedentes de dos familias valencianas (principalmente): los Vich y los Villaragut.
Durante el siglo XIX (Desamortización de Mendizábal), el monasterio pasó por una época de decadencia, donde los monjes se vieron obligados a vender el órgano y obras de arte (sobre todo pinturas) para poder subsistir.
En 1835 (cuando el monasterio contaba únicamente con 11 monjes) fue clausurado, pasando a manos privadas en 1838 (expoliándose y abandonándose por completo).
Monasterio de Nuestra Señora de la Murta fue adquirido por el ayuntamiento de Alzira en el año 1989, comenzando en 1995 las obras de restauración.
Como os comentaba al principio del post, la casa del guarda es la primera edificación que vamos a encontrar una vez dejemos el coche en el aparcamiento.
Es una construcción de finales del siglo XIX que actualmente sirve de punto de información y de recepción de visitantes.
El peiró y la nevera se encuentran en la vertiente de la umbría del valle, a continuación de la casa del guarda. El peiró es un pedestal donde se levantaba una cruz, y la nevera es una edificación que se utilizaba para el almacenamiento de nieve para usos terapéuticos y alimentarios del monasterio.
Los hornos de cal se encuentran distribuidos por diferentes partes del valle, y eran utilizados sobre todo para extraer materiales para la construcción.
Obras hidráulicas de extensa cronología que se iban restaurando conforme se iban deteriorando. Las que podemos observar en la actualidad pertenecen a los siglo XVII y XVIII.
El acueducto está formado por 8 arcos consecutivos que sortean los desniveles del terreno.
También encontraremos un cartel donde nos hablan de todo el ciclo de vida de los anfibios que habitan estos puntos de agua, así como de la importancia en su conservación.
Una idea que me parece muy buena es la que han tenido de colocar una rampa de madera para permitir la entrada y salida de animales de la balsa, chapó.
Los corrales de ganado se encuentran ubicados en la solana de la finca, de uso agropecuario del monasterio y posteriormente de la finca.
La almazara es la típica prensa de aceite y está datada de finales del siglo XIX.
El puente de Felipe II es el punto de acceso y entrada al monasterio, datado en la misma fecha que este. El nombre se debe a que Felipe II estando por estas tierras, se acercó a visitar el monasterio con sus hijos (ya que tenía una gran relación con la orden de los jerónimos).
Lo que más me ha gustado sin duda de este bonito paraje, es la multitud de actividades que se pueden realizar en él, entre ellas el senderismo.
Hay un total de 5 rutas senderistas con diferentes temáticas, longitudes y niveles de dificultad para que puedas elegir la que más se adapta a ti.
Todas están muy bien señalizadas (tanto el punto de inicio, como durante el recorrido) con pintura y con postes y paneles informativos.
Para comenzar esta ruta, nos tendremos que dirigir a la caseta del guarda (punto de información) que está situada en la entrada del Paraje Natural Municipal de La Murta.
Seguiremos la pista principal, desviándonos cuando así lo indiquen los paneles informativos. Las paradas que tiene esta senda histórica son:
Desde la Font de la Murta se puede enlazar con otros senderos y rutas senderistas (PR-CV 344 y PR-CV 345).
Aquí os dejo el enlace directo a la ruta en Wikiloc.
Al igual que la ruta anterior, para comenzarla deberemos de dirigirnos al punto de información, y esta vez, comenzaremos a ascender por un camino que sale a la derecha de la pista principal.
Gran parte del recorrido va a transcurrir en zona de umbría del valle y vamos a poder observar vegetación típica de este lugar como es:
Aquí os dejo el enlace directo a la ruta en Wikiloc.
Ruta lineal con una longitud de aproximadamente 3,1 km y una dificultad media alta, que nos llevará a conocer la cima más representativa del lugar y que da nombre a esta ruta: La Creu del Cardenal (con 545 metros de altitud).
En esta ocasión, para comenzar debemos dirigirnos al puente de Felipe II y comenzar el ascenso a través de una pista forestal, que más tarde se convertirá en un sendero empinado.
Una vez en la cima, encontraremos enlaces con el PR-CV 335.
Ruta lineal con una longitud aproximada de 5 kilómetros y una dificultad alta, que nos llevará a la cima de la sierra del Cavall Bernat. Desde aquí tendremos una vistas panorámicas y privilegiadas del litoral.
Para dar comienzo a esta ruta, deberemos dirigirnos a la caseta del guarda y, desde aquí, tomar una pista a mano izquierda hasta los Corrales, a partir de este punto, deberemos seguir las indicaciones hasta llegar a la cima.